Microbiota y La Piel

Ahora que se han acabado las fiestas, las comidas copiosas, los excesos y los cambios en las rutinas saludables, es el momento de recuperar buenos hábitos antes de que los excesos  produzcan trastornos en el cuerpo. En esta época son muy frecuentes las alteraciones intestinales que también repercuten en la piel.

Si queremos tener una piel sana y bonita es necesario cuidarse por fuera, pero también por dentro. La piel, como todos los órganos necesita una buena nutrición, hidratación (ojo, especialmente la interna) y descanso; buscando un equilibrio vital que ayude a minimizar la oxidación causada por los radicales libres del ambiente y que mantenga el equilibrio en nuestra microbiota.

El concepto de microbiota es algo muy relacionado con la piel: en nuestro día a día en el cuidado del cuerpo y de la piel en Alissa encontramos muchas veces alteraciones en la piel que están relacionadas con alteraciones intestinales de la microbiota.

Y entonces…¿Qué es la microbiota?

Nuestro organismo contiene billones de microorganismos que le acompañan.  Es lo que llamamos microbiota o flora (intestinal, cutánea, vaginal, etc.). Son un conjunto de microorganismos que viven en la piel y en la superficie de las mucosas, fundamentalmente en el tubo digestivo (especialmente en el intestino grueso) y la vagina.

Son cientos de especies diferentes de huéspedes como virus, bacterias, hongos y protozoos que son mucho más pequeños que nuestras células. Sólo de bacterias que viven en el cuerpo humano se han estudiado unas 3.000 especies y cada una cumple sus funciones en su hábitat. Cuando una cepa bacteriana pierde influencia y otra ocupa su espacio, se altera el equilibrio del organismo y aparecen determinadas patologías.

NUESTRO ORGANISMO HA EVOLUCIONADO HASTA CREAR HÁBITATS ESPECÍFICOS EN DIFERENTES PARTES DEL CUERPO CON UN SISTEMA ÚNICO DE MICROORGANISMOS

En ella existen especies estables y otras transeúntes. La microbiota es esencial para la vida de los organismos superiores, hasta el punto de que ésta no sería posible en su ausencia.

Los microorganismos residen en estos lugares de forma más o menos permanente y en algunos casos realizan funciones bene­ficiosas específicas. Muchos de estos seres microscópicos son beneficiosos para el correcto funcionamiento fisiológico.

Entre las principales funciones de la flora intestinal está la de proteger nuestro organismo de microorganismos patógenos.  Tener una flora equilibrada y variada es bueno para nuestra salud.

LA VIDA Y LA SALUD HUMANAS SON IMPOSIBLES SIN LA SIMBIOSIS EQUILIBRADA CON LAS BACTERIAS. ¡LAS BACTERIAS BUENAS, EN EQUILIBRIO, SON NUESTRAS AMIGAS!